lunes, 18 de junio de 2012

Ágora


SANTA HIPATIA DE ALEJANDRÍA

“Ágora”, de Alejandro Amenabar, tiene el atractivo de retratar un período de la historia poco abordado en el cine y rescatar la memoria de una mujer sabia de la antigüedad, pero reprueba al incluir elementos artísticos anacrónicos y, sobre todo, al distorsionar la historia que cuenta y el perfil de su personaje central.

Esta obra es el biopic de Hipatia de Alejandría (355-416), sabia alejandrina que incursionó en la filosofía, la astronomía y las matemáticas, hija del filósofo Teón. En la película se le presenta como una virgen que llegó a ser directora del museo de Alejandría, el cual fue destruido por los cristianos, y ella finalmente asesinada por éstos.

Ahora veamos algunas fallas artísticas e históricas que contiene:

La historia se desarrolla alrededor del año 391 d.C. en Alejandría, Egipto, pero en la película los romanos llevan vestuarios del siglo I. Además, en la ciudad aparece la escultura de la loba capitolina con Rómulo y Remo siendo amamantados, pero resulta que éstos fueron añadidos a la luperca hasta la época del Renacimiento…


“Ágora” también falla en los hechos que cuenta y los datos de su biografiada. La Biblioteca de Alejandría no fue quemada por los cristianos, como lo muestra la película, sino primero por Julio César en el siglo I, luego saqueada por Aureliano en el 273, y por Diocleciano en 297, y sus restos destruidos finalmente por los musulmanes en el siglo VII. Hasta donde se sabe sí hubo un saqueo ordenado por el emperador Teodosio I en el 391, pero fue debido a que en su interior se albergaba la estatua de Diocleciano. Amenabar señala que con la destrucción de la Biblioteca de Alejandría fueron destruidos 500 000 rollos, pero de acuerdo a Séneca fueron 40 000.


La película presenta a los cristianos como brutos, ignorantes e intolerantes, pero Amenabar pasó por alto, o deshonestamente ocultó, el hecho de que en esa época y en una ciudad cercana vivió uno de los cristianos más sabios e ilustres de toda la historia, nada menos que Agustín de Hipona (354-430).

En cuanto a Hipatia de Alejandría, esta mujer no fue atea ni anticristiana, como lo sugiere la película, sino creyente; y si no se casó, no fue por feminista, sino porque era una filósofa neoplatónica que despreciaba el cuerpo. Ella nunca fue directora de la Biblioteca de Alejandría y no murió siendo una joven, sino a la edad de 61 años. Y lo más importante, no fue asesinada por una conspiración del obispo Sinesio de Cirene, porque éste murió dos años antes que ella. Hipatia fue atacada por fanáticos alejandrinos quienes creían que era la culpable de que el prefecto Orestes y el obispo Cirilo no se pudieran reconciliar.


En fin, de “Ágora” creo que lo mejor es la actuación de la bellísima Rachel Weisz, la cual, sin embargo, no pudo salvar una película que naufraga en las aguas del anacronismo y la deshonestidad.

Ágora
Alejandro Amenábar, 2009, España
Con: Rachel Weisz, Max Minghella, Oscar Isaac, Rupert Evans
127 min.


(Agora - Trailer HD español:)


jueves, 14 de junio de 2012

El proscrito de Dios


El crimen de traducir la Biblia

Este es un interesante biopic sobre William Tyndale (1490-1536), clérigo inglés que tradujo la Biblia a su idioma, lo cual le costó muy caro.

La historia comienza en Inglaterra en 1519 con una escena muy significativa: un sacerdote pide a una niña que comience a rezar el “Padre Nuestro”, ella lo hace, pero no en latín, como habría de esperarse, sino en inglés, ante lo cual el cura reacciona con espanto y condena a la muerte al padre de la niña y obliga a la madre a regenerar en adelante a sus hijos.

Tres años más tarde encontramos a Tyndale como un predicador muy fogoso, imbuido en las ideas de la reforma protestante. En una plaza pública predica de la siguiente manera:

«¿Qué podemos decir de Inglaterra ahora? ¿Qué podemos decir de nuestros burdos monjes, de nuestro avaros sacerdotes y nuestros pomposos prelados? Su evangelio no es el de Dios, sino un comercio muy productivo».

Pero Tyndale no es religioso místico, sino un gran intelectual, que hace traducciones de obras clásicas griegas al latín. Su proyecto más ambicioso es traducir la Biblia al inglés para que la gente del pueblo pueda leerla, o al menos entenderla, ya que la mayoría era analfabeta.

En 1925, Tyndale lleva a cabo la primera parte de su obra: da a la imprenta su traducción del Nuevo Testamento, pero debe hacerlo en Colonia, Alemania, porque en Inglaterra tal empresa era imposible.


El caso Tyndale pronto llega a oídos del intolerante cardenal Wolsey, quien a su vez lo denuncia ante el rey Enrique VIII; luego, éste pide a Tomás Moro que refute la traducción del reformador inglés, considerado ya para estas fechas como un “hereje protestante”.

Las autoridades eclesiales pronto echan a andar un complot para atrapar a Tyndale, recurren a sus juegos favoritos de espionaje, mentiras y traición. Tyndale cae en la trampa y es arrestado.

El juicio que presenta la película es sumamente interesante, aquí comparto un fragmento, el juez le dice:

«Ha sido arrestado y está aquí acusado de herejía, ya que: primero: usted mantiene que la fe por sí sola justifica. Segundo: usted mantiene que creer en el perdón de los pecados y abrazar la misericordia ofrecida en el evangelio es suficiente para la salvación. Tercero: usted afirma que las tradiciones del hombre no atan el alma. Cuarto: usted afirma que ni la virgen ni los santos oran por nosotros en sus personas. Y quinto: usted afirma que ni la virgen ni los santos deben ser invocados por nosotros».

El magistrado pregunta a Tyndale cómo responde a estas acusaciones, y éste contesta:


«Respondo así con una conciencia clara de Dios y el hombre, que jamás he mantenido, afirmado, sostenido o asegurado nada contrario al simple significado de las Sagradas Escrituras de Dios. Sobre esto, y sólo sobre esto, me apoyo».

Finalmente, el paladín de la traducción inglesa de la Biblia, sella con su martirio su gran causa.

Una escena última y sorprendente sirve como epílogo a esta película: el rey Enrique VIII sostiene una versión de la Biblia basada en la traducción de Tyndale, los obispos dicen no haber encontrado error alguno en ella. El rey exclama: «Entonces, si no contiene herejías, en el nombre de Dios dejémosla circular entre el pueblo». Escena absurda, como absurda es la intolerancia, pero al mismo tiempo gratificante, porque revela que la obra de William Tyndale no fue en vano.

God’s outlaw
Tony Tew, 1987, RU-EUA
Con: Roger Rees, Bernard Archard, Keith Barron, Pamela Salem
93 min.

Clasificación: "B" (contiene un par de escenas de violencia)
Mi voto: 7*

El proscrito de Dios - Trailer:


miércoles, 13 de junio de 2012

Cristiada


¡VIVA CRISTO REY Y MUERA LA REVOLUCIÓN!

“Cristiada” es una película con más méritos artísticos que históricos, sin embargo, interesante por representar el perenne conflicto que se da entre la religión y el estado laico, cuando uno de los dos, o ambos lados, rayan en el fanatismo y la intolerancia.

Esta no es la primera ni la mejor película que se ha hecho sobre la guerra cristera que sucedió en México entre 1926 y 1929, ya otras han abordado este tema, como “Miércoles de ceniza”, de Roberto Gavaldón (1958); “La guerra santa”, de Carlos Enrique Taboada (1977); y más recientemente: “El padre Pro”, de Miguel Rico Tavera (2007) y “Desierto adentro”, de Rodrigo Plá (2008).

Con un título menos imaginativo que las anteriores, “Cristiada”, es la producción más ambiciosa de todas; es, de hecho, la película mexicana más cara que se ha rodado hasta el momento, con un presupuesto de 110 millones de pesos. Todo lo cual se refleja en sus elementos artísticos: una buena dirección de Dean Wright, que debuta como realizador después de haber ganado gran prestigio como diseñador de efectos especiales (en un historial de películas verdaderamente impresionante: Titanic, Sexto sentido, Estigma, El hombre bicentenario, El señor de los anillos y Crónicas de Narnia, entre otras); una buena fotografía, buena ambientación y vestuario, y un gran reparto actoral, con Andy García a la cabeza, seguido de Peter O´toole, Rubén Blades, Catalina Sandino, Eva Longoria, Eduardo Verástegui y otros más.



Pero si "Cristiada" descuella como producción artística, no podemos decir lo mismo en cuanto a su credibilidad histórica, tomando en cuenta que se ostenta como una “película histórica”, pues su tratamiento es sumamente maniqueísta en el cual los cristeros aparecen como los buenos y los civiles como los malos.

El argumento que maneja es éste: el presidente Plutarco Elías Calles siguiendo el espíritu de la revolución, y debemos suponer que sobre todo el de la reforma social decimonónica, continúa la “limpieza” del país de la hegemonía de la iglesia católica romana, la cual se erige como un obstáculo para la incipiente república.

El presidente Calles es el malo de la película, el mismísimo diablo que odia todo credo religioso y en particular el romano, y quien en un ataque de rabia dicta severas medidas contra los curas despojándolos de todos sus privilegios. Esta represión provoca que el pueblo católico se levante en armas y resista a este “enemigo de Dios”. Los protestatarios, más no protestantes, se levantan al grito de “¡Viva Cristo Rey!”, razón por la cual se les llamó “cristeros”, y así, empuñando las armas salieron a defender la santa iglesia católica romana que, creían, era parte de la identidad del auténtico mexicano.




La historia que nos presenta la película “Cristiada” tiene un par de méritos: el darnos a conocer el caso del general Enrique Gorostieta, un regiomontano presuntamente ateo que decide prestar sus servicios y experiencia a la causa de los cristeros; también el mostrarnos la brutalidad de algunos alzados, como Victoriano Ramírez, apodado “El Catorce”, por haber dado muerte, él solo, a este número de soldados.

Pero esta producción adolece de varios errores históricos: el más importante es el hecho de que el cierre de los templos católicos, que fue el detonador del alzamiento cristero, no fue ordenado por el presidente Calles, sino por los mismos curas católicos que de esta manera querían protestar contra el gobierno. Esta obra también tiene varias imprecisiones sobre Enrique Gorostieta, su personaje principal. Según una entrevista realizada a uno de sus nietos, este general no era ateo, sino creyente; éste no tenía dos hijas, sino tres hijos: dos varones y una niña; además, él nunca se entrevistó personalmente con el presidente Calles, como lo presenta la película (periódico "El Norte", 17-mayo-2012, secc. "Gente", pág. 9).

En fin, hay cosas que cuesta trabajo aceptar al ver esta cinta, por ejemplo, creer que Andy García es un mexicano regiomontano, porque tiene una cara de cubano que no puede ocultar por más maquillaje que le pongan. Pero más difícil es creer que la guerra cristera fue por la defensa de la libertad y la fe, porque la verdad es que ocultaba intereses menos piadosos, como la reposición del predominio católico en la sociedad mexicana y su reafirmación como la única iglesia oficial de la nación, cosa que ni el presidente Calles ni millones de mexicanos hoy estaríamos dispuestos a aceptar, porque creemos que en las sociedades modernas lo que debe imperar es la libertad, comenzando con la de pensamiento y religión.

CRISTIADA
Dean Wright, 2012, México
Con: Andy García, Peter O´toole, Rubén Blades, Catalina Sandino, Eva Longoria, Eduardo Verástegui
145 min.

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Clasificación: "B-15" (contiene varias escenas de violencia)
Mi voto: 7* 
 
(Cristiada Trailer HD español:)


martes, 12 de junio de 2012

Emboscada en Waco


El polvorín de las sectas violentas

En abril de 1993 los medios de comunicación estremecieron al mundo al dar la noticia de que 86 personas de la secta “davidiana”, en Waco, Texas, se habían autoinmolado al ser sitiados por la policía norteamericana. El líder de esta secta era Vernon Wayne Howell, mejor conocido como “David Koresh”. Este hombre fue un fanático religioso que dominaba las mentes de sus adeptos y abusaba de ellos en muchas formas. La película de TV “Emboscada en Waco”, de Dick Lowry, trata este caso de una manera muy realista y cuenta con un gran conocimiento de causa, pues fue rodada en el mismo año en que sucedieron la tragedia.

Esta producción se limita sólo a describir los últimos días de este fatídico grupo. Presenta un David Koresh demencial, que se sabía la Biblia de memoria y que predicaba hasta 10 horas sin parar. Su doctrina básicamente consistía en decir que él y sus seguidores eran los ungidos de Dios que establecerían el reino de Dios en la tierra, y que todas las demás personas eran emisarios del diablo y por lo tanto sus enemigos.


Koresh, nombre que significa: “Ciro”, y el cual supuestamente le fue revelado por Dios, aparte de su fanatismo religioso tenía dos grandes intereses: las armas y la chicas, de ambas cosas se abasteció desmedidamente.

Koresh  compraba numerosas armas y entrenaba a sus seguidores para que supieran defenderse de los “babilonios” que, decía, algún día los atacarían.

En cuanto a las mujeres, al parecer no hacía distinción ni menospreciaba a ninguna: se metió con mujeres adultas y hasta con una anciana, pero al parecer su predilección eran las adolescentes y las mujeres casadas. Tomaba las hijas o esposas de sus propios seguidores porque, decía, “el Señor” así se lo revelaba.


Koresh adoctrinó a su gente, diciéndoles que el mundo era malo, que ellos, sus seguidores, eran el pueblo escogido por Dios, y que pronto serían atacados por los babilonios o enemigos de Dios. Este discurso, sin duda, era para anticiparse a la intervención de las autoridades norteamericanas, quienes ya le seguían el paso por algunas demandas de posesión de armas y abuso sexual que ex-adeptos de la secta habían presentado en su contra.

El “Apocalipsis” llegó cuando finalmente las autoridades se decidieron a intervenir, sitiaron el rancho de “Monte Carmelo” para aprehender a Koresh y liberar a sus seguidores; pero éstos, impulsados por su líder, resistieron con armas de fuego a los agentes y entonces se desató el pandemonium. Casi un centenar de personas, entre ellas varios niños, perecieron en las llamas del siniestro que puso fin a aquella locura religiosa.


Hoy se cuestiona si realmente se trató de un suicidio colectivo o si fueron víctimas de la violencia judicial. Lo cierto es que David Koresh fue un fanático religioso que manipuló a sus adeptos, guiándolos no hacia cosas buenas ni mucho menos hacia la gloria celestial, sino lamentablemente hacia la destrucción, cosa que queda bien retratada en esta película y que nos invita a la reflexión.

In the line of duty: Ambush in Waco
Dick Lowry, 1993, EUA
Con: Tim Daly, William O´Leary, Neal McDonough, Marley Shelton
98 min.

Clasificación: "B-15" (contiene escenas de violencia y sensualidad)
Mi voto: 6*

Emboscada en Waco - Trailer:


lunes, 11 de junio de 2012

En el camino


FANATISMOS RELIGIOSOS QUE ATENTAN CONTRA EL AMOR

Esta es una interesantísima película que cuestiona los fanatismos religiosos que en lugar de unir más a las parejas, destruyen su amor.

Luna y Amar son una joven pareja de Sarajevo, ella es una bella aeromoza y él un controlador aéreo bien parecido. Ambos se aman y llevan una vida sexual muy activa, pero no pueden tener hijos; para colmo, él es despedido de su trabajo, pero esto no es lo peor, sino un hecho fortuito que inclina su relación en un declive que dará al traste con todo lo que su pasión había construido.

Amar se encuentra a un viejo amigo, el cual ahora pertenece a la secta musulmana de los “wahhabis”, religiosos fundamentalistas y machistas, que menosprecian a las mujeres, así como toda expresión de pasión amorosa. Poco a poco, Amar se va introduciendo a esa comunidad religiosa, al parecer más para superar su frustración por no tener trabajo que por un gran deseo espiritual.


La conversión de Amar hace que él se vaya distanciando de Luna, hasta el grado de poner en jaque su relación. Luna intentará rescatar el amor que aún tiene por Amar, y éste hará lo mismo, pero para él no será fácil enredado como está en ese fanatismo, compleja disyuntiva ante la cual ambos tendrán que tomar una decisión.


Esta película es una gran obra de arte, fue escrita y dirigida por Jasmila Zbanic, una joven cineasta de Sarajevo, y es protagonizada por dos buenos intérpretes croatas: Zrinka Cvitesic, una de las mujeres más hermosas del cine actual, y Leon Lucev, un galán con grandes dotes histriónicas. “En el camino” cuenta además con una buena fotografía, excelente vestuario y ambientación; pero su valor principal es contar una historia de denuncia de todo fanatismo religioso, el cual suele convertirse en un peligro contra los valores humanos más sublimes, como son el amor de la pareja y el respeto por los derechos de las mujeres.  


NA PUTU
Jasmila Zbanic, 2010, Bosnia Herzegovina
Con: Zrinka Cvitesic, Leon Lucev, Ermin Bravo, Mirjana Karanovic
100 min.
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Clasificación: "C" (contiene escenas de sexo)
Mi voto: 8*

La religión en el cine mexicano

En México se han producido películas de alta calidad que han tratado temas religiosos, tanto en el cine clásico, como en el moderno. Hagamos un recuento:

Sorprende descubrir que en la época de oro del cine mexicano, cuando la sociedad era sumamente católica y conservadora, se rodaron cintas con temas bastante atrevidos:

“En tiempos de la Inquisición”, de Juan Bustillo Oro (1946), presenta el amor entre un cristiano y una mujer musulmana, lo cual resulta en tragedia.

“Doña Perfecta”, de Alejandro Galindo (1950), es el drama de un libre pensador en un pueblo muy religioso controlado por una dama católica fanática.


“Miércoles de ceniza”, de Roberto Gavaldón (1958), presenta el caso de una mujer violada por un sacerdote, la cual se vuelve anti-católica y lucha contra los cristeros.

En el cine post-clásico destacan: “Fe, esperanza y caridad” (1972), que presenta las tres virtudes cristianas en el contexto de la pobreza mexicana.

“El profeta Mimí”, de José Estrada (1972), y “La venida del rey Olmos”, de Julián Pastor (1974), que tratan sobre líderes de sectas.

“El Nuevo Mundo”, de Gabriel Retes (1976), es una película histórica que cuestiona la leyenda de la virgen de Guadalupe. Estuvo vetada por varios años precisamente por el tema que toca.


El nuevo cine mexicano que se realiza a partir de la década de 1990 ha venido abordando con mayor libertad y creatividad los temas religiosos:

“Ave María”, de Eduardo Rosoff (1999), es una alegoría sorjuanesca, sobre una monja intelectual condenada por la inquisición.

"El crimen del padre Amaro, de Carlos Carrera (2002), cuestiona el voto del celibato, pues trata la historia de un joven sacerdote que se enamora de una muchacha de su parroquia.

“Morirse está en hebreo”, de Alejandro Springall (2007), es una interesante comedia sobre la comunidad judía en México, abordando específicamente la ceremonia judía del duelo.

“Luz silenciosa”, de Carlos Reygadas (2007), es una película minimalista que presenta un drama familiar en una comunidad menonita en el norte de México.


“Malos hábitos”, de Simón Bros (2007), presenta tres casos de anorexia, uno de ellos es una monja que sacrifica su salud por el bien del mundo.

“Desierto adentro”, de Rodrigo Plá (2008), aborda el fanatismo y la demencia de un desertor de la guerra cristera, quien funda su propia secta.

“Morenita: el escándalo”, de Alan Jonson Gavica (2008), se atreve a desarrollar un thriller sobre lo que pasaría si de repente se roban el ícono más popular de la religiosidad mexicana: el ayate de la virgen de Guadalupe que está en la basílica.


“Marcelino, pan y vino”, de José Luis Gutierrez (2010), es un remake del clásico español, pero esta vez ambientado en la revolución mexicana.

“Cristiada”, de Dean Wright (2012), presenta el conflicto religioso mexicano de los años veinte, pero en torno a un general regiomontano ateo, quien se une a la guerra cristera.

Alguien dijo que toda buena obra de arte debe tratar sobre los tres grandes temas universales, que son la religión, el amor y la muerte, y vemos que el primero, la religión, es un tema recurrente en el cine mexicano; pero es interesante observar cómo ahora, en una sociedad con pluralidad religiosa, el abanico de confesiones se abre ampliamente para dar cabida a otros credos y no sólo al universo católico, porque, después de todo, el cine es un reflejo, con dosis de creatividad y belleza, de nuestra realidad.


sábado, 9 de junio de 2012

Intima obsesión


LOCURAS PASIONALES DE LA “GENTE CUERDA”

“Intima obsesión” (Assylum) es un thriller psicológico que cuestiona los presupuestos sobre quiénes son más peligrosos: si los llamados “locos” o las personas que creemos cuerdas.

La película está ambientada en Inglaterra en 1960 y gira en torno a un par de psiquiatras, una mujer apasionada y un loco furioso. La historia comienza cuando Max, un exitoso médico, se instala con su familia en un hospital psiquiátrico en las afueras de Londres. Ahí son recibidos por Peter, un médico residente que atiende a varios internos y en especial a Edgar, un guapo escultor que asesinó a su mujer y busca su rehabilitación bajo tratamiento psiquiátrico. Stella, la esposa de Max, en un principio busca adaptarse a su nueva vida y cuida de su pequeño hijo, pero pronto se enfrenta a dos cosas que comienzan a inquietarla: por un lado se da cuenta de que el solterón doctor Peter comienza a acosarla, y por otro lado conoce al misterioso Edgar, hacia el cual se siente fuertemente atraída. Estas situaciones provocarán un torbellino de pasiones, celos y tragedias para todos los implicados, incluyendo al ingenuo y cornudo de Max, y su pequeño Charlie, víctima inocente y pasiva de esta historia.

El argumento está muy bien desarrollado, la historia indaga en las profundidades de la psique humana, en particular de estos personajes demenciales, y lo más interesante es que su postulado es que los verdaderos monstruos no son los de la fantasía, sino los seres humanos pervertidos por las pasiones más bajas, quienes, por lo mismo, pueden cometer las barbaridades más atroces.

En fin, una buena historia para reflexionar, y además para disfrutar porque cuenta con una estupenda fotografía, ambientación y, sobre todo, actuación de un ramillete de celebridades, como son la bellísima Natasha Richardson, quien lamentablemente ya falleció; el veterano Ian McKellen, que está insuperable en su papel; Hugh Bonneville, quien sorprende con su serio personaje, y Marton Csokas, quien está avasallante.

“Íntima obsesión” es un buen thriller porque no te deja despegarte de tu lugar, pues te mantiene en tensión constante, pero principalmente por ser una obra inteligente que pone en cuestionamiento la cordura y la supuesta bondad del ser humano.


ASYLUM
David Mackenzie, 2005, RU-Irlanda
Con: Natasha Richardson, Hugh Bonneville, Ian McKellen, Marton Csokas.
99 min.
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Clasificación: "C" (adultos)
Mi voto: 7* 

(Asylum Trailer:)

martes, 5 de junio de 2012

Ciencia ficción, religión y cine



Parece extraño relacionar el cine de ciencia ficción con la religión, pero esta unión ya se ha dado y hay algunas películas que vale la pena comentar. El experimento más antiguo debe rastrearse hasta 1914 con la cinta: “Golem”, de Henrik Galeen y Paul Wegener, trata sobre un rabino que, queriendo imitar a Dios, crea con arcilla un homúnculo, al cual logra animar, pero después el engendro se vuelve un monstruo.

Pero no es sino hasta la década de 1990 cuando los cineastas retoman la simbiosis y desarrollan nuevas propuestas: así en 1997 se estrena “Contacto”, de Robert Zemeckis, la cual se basa en la novela de Carl Sagan; ésta presenta el romance entre un teólogo y una astrónoma escéptica, resultando en una hermosa parábola de la relación entre fe y ciencia.


En 2007 aparece “Prueba de fe” (The Reaping) de Stephen Hopkins, que trata sobre las diez plagas bíblicas en el contexto catastrofista de hoy.

En 2010 se filma “El Libro de los secretos” (The Book of Eli), de Albert y Allen Hughes, la cual presenta la lucha por preservar la Biblia en un mundo postapocalíptico.

Y más recientemente, en 2011, se estrena “Priest”, de Scott Charles Stewart, cinta bizarra que presenta a los sacerdotes católicos como cazavampiros.


lunes, 4 de junio de 2012

Diez


10 CUADROS SOBRE LA VIDA COTIDIANA EN IRÁN


“10” es el título de una singular obra experimental del cineasta iraní Abbas Kiarostami, no es una película convencional, pero sí muy original y un material muy valioso para conocer la vida que se desarrolla todos los días en las ciudades de Irán, con historias muy similares a las que se presentan en cualquier lugar.

Esta película contiene tres elementos principales: un automóvil en movimiento, una hermosa conductora iraní y su respectivo acompañante en turno. Eso es todo, lo demás es accesorio, parte del panorama, de la situación vital en la que se presentan todos los encuentros.

La película entera transcurre en el interior del automóvil y se desarrolla en 10 capítulos (de ahí el nombre de la obra), que van en cuenta regresiva. En cada uno de ellos toma su turno un personaje distinto, ante un par de cámaras escondidas, cuyo montaje final presenta en unos capítulos sólo a la conductora y en otros también al acompañante que se ha subido a su auto.

10. El primer turno es para Amin, el pequeño hijo de la conductora, quien con una actitud muy rebelde reclama a su madre por haberse divorciado y vuelto a casar.

9. La hermana de la conductora le cuenta a ésta sus problemas familiares.

8. Una anciana que se dirige hacia el templo de Ali Akbar, como todos los días, a orar; muestra a la conductora sus rosarios y exhorta a ésta a rezar.

7. Por la noche, la conductora levanta a una prostituta, la cual expresa sus ideas sobre los hombres y las relaciones matrimoniales.

6. Una joven que viene del templo, de estar orando para que Alá le conceda casarse con su indeciso novio.

5. Otra vez, Amin, el hijo de la conductora, que ahora viene de estar con su papá y hace confesiones indiscretas de su progenitor.


4. Una mujer abandonada por su pareja, a la cual la conductora trata de animar, diciéndole que las mujeres no deben depender de los hombres para ser felices, sino amarse a sí mismas.

3. De nuevo, Amin, que está mejor portado con su mamá y le pide clases de manejo.

2. Otra vez la joven que reza por el milagro del matrimonio. Ésta es una de las escenas más emotivas, ella se quebranta ante la cámara porque el milagro no ha llegado, y se descubre mostrando su cabeza rapada en señal de lamento.

1. Amín quiere ir con la abuela.

Como lo dije anteriormente, “10” es una película rara, no tiene un discurso narrativo, ni acción, ni locaciones, pero no es tampoco un documental, ni un programa de entrevistas, aunque parece ambas cosas; me inclino más por interpretarla como una obra experimental, de un veterano del cine, que con esta cinta simplemente retrata la vida de la gente común en el Irán moderno, con sus luchas, su fe religiosa, sus frustraciones, sus aspiraciones. Y precisamente ésta es su más grande virtud, porque no es una falsa interpretación de la realidad, sino un simple, pero hermoso, retrato de ella.


Los personajes que aparecen en esta película hablan no sólo con sus palabras, sino con sus gestos, con su invisibilidad, con sus risas o con su llanto, pero ninguna expresión y ninguna de sus historias puede ser ignorada, porque en ellas puede verse reflejado cualquier espectador, pues son experiencias humanas, que a todos nos tocan de una o de otra forma, sin importar nuestra ideología o religión.

TEN
Abbas Kiarostami, 2002, Irán
Con: Mania Akbari, Amin Maher, Roya Arabshahi
94 min.
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Clasificación: "B"
Mi voto: 8*

domingo, 3 de junio de 2012

Confidencial


CAUTIVOS EN SU PROPIA CASA

Esta es una película sencilla, sin mucha producción, pero muy valiosa, porque nos muestra que en el conflicto del Medio Oriente el extremismo político-religioso no sólo se da en el lado musulmán, sino también en el judío.

Este drama se desarrolla en la Palestina actual, trata el caso de una familia islámica, compuesta por los padres y sus cinco hijos, la cual vive en los territorios ocupados. Cierto día llega el ejército israelí obligando a los residentes a desalojar la zona, porque intenta ocupar sus casas como cuarteles para combatir a los rebeldes palestinos. Mohammad, el padre de familia, se niega a abandonar su casa y dejarla en manos de los soldados hebreos. Éstos, entonces, obligan a la familia a confinarse en la planta baja, mientras ellos ocupan el piso superior como base militar; además, amenazan a los palestinos con matarlos si suben a esa área o rompen alguna de las reglas que les han impuesto.


Esta situación pone en una dura tensión a ambos bandos, a la familia palestina que ha visto invadida su casa y violada su privacidad, y a los soldados que han ocupado esta propiedad ajena y ahora se cuidan de los palestinos, que están en su propia casa, pero ven como enemigos. Los integrantes de la familia titubean, además, para saber qué decisión tomar: si combatir a los soldados o someterse pacíficamente. Los ocupantes, por su parte, no dudarán ni un segundo en soltarle un plomazo a cualquiera de estos palestinos que se rebele, no importa si es el padre, la madre o uno de los niños.


Toda esta trama es claramente una parábola sobre el conflicto árabe-israelí que desde hace años azota el Medio Oriente. Pero esta película tiene la singularidad de que ahora nos cuenta las cosas desde la perspectiva de los palestinos, quienes sienten precisamente eso: que los israelíes han llegado a invadir su casa, han violado su intimidad, se han adueñado de sus territorios y, por si fuera poco, son los que han impuesto las condiciones para la coexistencia de ambos pueblos.

Y esto es precisamente lo que quería hacer el director Severio Costanzo, quien anteriormente rodaba documentales y éste es su primer largometraje de ficción, contar las cosas desde otro ángulo. Y no cabe duda que ha realizado una gran obra, una que nos ayuda a entender la resistencia violenta de los palestinos, quienes parecen no hacer otra cosa que estar defendiendo su casa, su derecho a la vida y su libertad.

Private
Severio Costanzo, 2004, Italia
Con: Mohammed Bakri, Hend Ayoub, Areen Omari
89 min.
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Clasificación: "B"
Mi voto: 7*
 
(Confidencial Trailer:)

sábado, 2 de junio de 2012

Ushpizin: Los invitados


GRAN COMEDIA JUDÍA PARA CELEBRAR LA VIDA

“Ha -ushpizin” es una frase hebrea que significa: “los invitados”, y es el título de una hermosa comedia judía que llega al corazón de cualquier persona sensible, y transmite un gran mensaje de fe y amor.

Su historia se desarrolla en el Israel moderno, pero se enfoca en una comunidad “hasidim”, que es la línea ortodoxa y tradicionalista del judaísmo, y en particular en el matrimonio del rabino Moshe y su esposa Mali. Éstos se están preparando para la fiesta del “Sucot” (“cabañas”), la cual recuerda el peregrinaje de los israelitas por el desierto, cuando vivieron en moradas temporales. Esta fiesta dura siete días y las familias la celebran pernoctando en cabañas portátiles de madera, en donde comen, brindan y duermen.

Pero Moshe no tiene dinero para comprar una cabaña ni para abastecerse de alimentos, especialmente de los dátiles que no pueden faltar en esa fiesta. Un milagro, sin embargo, lleva a las manos de Mali el dinero que ellos necesitan, y un suceso extraño lleva a Moshe la sucá (cabaña) para celebrar.


Pero tal parece que ninguna bendición llega sin una prueba, porque a la par que Moshe y Mali reciben estos regalos, un par de judíos exconvictos y bribones, uno de ellos antiguo amigo de Moshe, llega a la casa del piadoso matrimonio. El rabino ve como una bendición este evento, pues considera que Dios les ha enviado unos “ushpizin” (invitados) para celebrar Sucot. Lo que no saben él ni su esposa es que estos sujetos extraños no son nada piadosos, ni se han despojado de sus antiguas mañas, sino que son unos judíos libertinos que meterán en grandes aprietos a este matrimonio y a todo el gueto de los hasidim.


Hasta aquí con el relato, porque hay que verlo para disfruarlo. “Ushpizin” es una obra de arte, con elementos muy interesantes tanto en su historia como en su producción. Gidi Dar, el director, filmó en una comunidad judía ortodoxa real, llamada “Haredi”, cuyos miembros no tienen televisores y nunca habían dejado entrar las cámaras a su colonia. La película se rodó en veinticinco días y participaron miembros de la comunidad Haredi, los cuales no son actores profesionales.

Los actores que interpretan a Moshe y Mali, que son Shuli Rand y Michal Bat-Sheva Rand, respectivamente, son un matrimonio en la vida real. Shuli Rand además fue el guionista y autor de la historia. Él era un actor profesional, pero después se convirtió en un judío ortodoxo y se apartó del cine. Gidi Dar lo contactó y le pidió trabajar con él; Shuli Rand aceptó y él fue el intermediario con los “haredi” para que permitiera llevar a cabo la filmación. La comunidad permitió a Shuli Rand actuar en la película, pero con una condición: que el personaje de su esposa no lo hiciera una actriz, sino su esposa verdadera; él aceptó y, aunque Michal no era profesional, ella hizo un gran papel.


Así, “Ushpizin” es una invitación a conocer de primera fuente una comunidad judía muy singular, pero sobre todo a contagiarnos con su fe y su forma de celebrar la vida.

HA-USHPIZIN
Gidi Dar, 2004, Israel
Con: Shuli Rand, Michal Bat-Sheva Rand, Shaul Mizrahi, Ilan Ganani
90 min.


(Trailer:)

viernes, 1 de junio de 2012

Juramento de venganza


Los ministros de la violencia

Esta película de bajo presupuesto presenta una historia interesante en torno al fanatismo religioso y los traumas psicológicos, pero no logra cuajar del todo para convertirse en una buena cinta de suspenso o de acción.

“Dante” y “Perfecto” son los nombres de dos gemelos asesinos que viven en un barrio del Bronx y actúan de una forma muy extraña: rezan antes de cometer sus crímenes, diciendo: “Señor, perdónanos por lo que vamos a hacer”, y luego, al matar a sus víctimas, dejan junto a los cadáveres folletos religiosos. Por todo esto la policía, encabezada por la guapa “Celeste”, quien quiere vengar la muerte de su padre asesinado por ellos, busca incansablemente a estos siniestros personajes, a los que ha puesto el mote de “los ministros”.

Pero ¿qué pasa cuando víctima y victimario se enamoran?, ¿cuando los asesinos matan al hombre equivocado?, ¿cuando el que parece inocente resulta culpable? Estos son algunos enredos con los que Franc Reyes, director y escritor de esta historia, arma una película sumamente violenta.

Pero más interesante es el caso que pone bajo los reflectores, digno de un estudio psicológico: el que un par de hermanos, quienes en un principio son cristianos sanos y activos en su iglesia, por causa de unos eventos trágicos desatan una demencia religiosa, se convierten en criminales que matan en “nombre de Dios”, recitan pasajes de la Biblia y aplican la ley del talión.


Por el lado artístico, esta cinta no tiene muchos elementos que destacar, con excepción de la interpretación de John Leguizamo, en el doble papel de los gemelos. El nombre de Harvey Keitel en esta película prometía mucho, pero decepciona por una cansina actuación.

The ministers
Franc Reyes, 2009, EUA
Con: John Leguizamo, Harvey Keitel, Florencia Lozano
90 min.

(Trailer HD)