domingo, 26 de agosto de 2012

La duda


LA DUDA, LA HERMANA DE LA CERTEZA

“La duda” es una obra suspicaz, un puzle de sospechas con tintes hitchcockianos que, aunque ambientada en los sesentas del siglo pasado, se inserta en el reciente escándalo de los curas pederastas, el cual ha mancillado ineluctablemente la presunta imagen impoluta de la iglesia romana, con una excreción propia e inmunda.

La historia se desarrolla en un colegio católico en el Bronx de 1964, dirigido por la hermana Aloysius, una monja sexagenaria, que rige con vara de hierro,  la cual es asistida por la joven y cándida hermana James y el sacerdote Brendan Flynn. La institución tiene el mérito de recibir por primera vez como estudiante a un niño de color, el cual pronto se gana el afecto del padre Flynn. Pero precisamente dicha amistad despierta las sospechas de las susodichas monjas, primero de la joven, quien le calienta la cabeza a la superiora reportándole el especial afecto del cura por su pupilo.

La monja rectora inicia su propio proceso investigativo hasta, sin prueba alguna, llegar a la conclusión de que el clérigo es un come-niños, por lo que se faja bien el hábito y decide encarar al sospechoso, convirtiéndose en inquisidora y quemando en leña verde en el hervor de su imaginación al padre Flynn, quien se defiende como puede y parece desear que su sotana fuera un par de alas que le ayudara a escapar de aquella urraca furibunda.


Y después de aquel auto de fe, con sólo dos personas, la inquisidora y su víctima, pero con más fuego que el de la Santa Inquisición en días de Torquemada, queda al final sólo la duda, la sospecha, la incertidumbre; la cual destruye la carrera de un cura suspicaz y envuelve en un torbellino de escepticismo a una monja que ya no sabe en qué ni en quién creer.

“La duda” se envuelve en un thriller psicológico-religioso para suscitar la emoción, pero a todas luces parece una disculpa o defensa de la iglesia católica para que nadie arroje la piedra sobre su resquebrajada imagen y creamos que también los curas pueden llegar a ser víctimas de falsas acusaciones en su contra. De que esto pueda suceder nadie lo duda, pero es evidente que la balanza se carga del lado de los cientos, sino es que miles de testimonios de víctimas que en su infancia o adolescencia fueron maltratados por sus presuntos guías espirituales, quienes al exteriorizar sus malas intenciones y traducirlas en abusos sexuales desgraciaron a estas personas de por vida.


Para mi gusto, lo mejor de la película son las actuaciones de Meryl Streep y Philip Seymour Hoffman en los principales papeles, y sobre todo la gran discusión en la que se enfrascan, un duelo de titanes, en el cual uno deja de interesarse por saber quién tiene la verdad, sino que se disfruta por ver quién es el mejor actor, una escena de oro, de lo mejor del género dramático, de esto no cabe la menor DUDA.

DOUBT
John Patrick Shanley, 2008, EUA
Con: Meryl Streep, Philip Seymour Hoffman, Amy Adams
104 min.

La duda - trailer hd en español: